Cada vez más frecuentemente, se ven situaciones de lo más variadas respecto de los costos de operar correctamente los canales sociales online. Una inmensa mayoría de las marcas y empresas que se lanzan a la búsqueda de la proverbial «comunidad» en Facebook, Twitter y demás plataformas/canales, lo hacen con muchos menos recursos que los realmente necesarios. A veces, se invierte tanto menos de lo requerido, que el resultado es un fracaso estrepitoso, que será debidamente asignado al canal online, y no a la mala implementación realizada: Facebook/Twitter/Google+/Instagram/Pinterest/Etc. no funcionan. (Tip: funcionan muy bien, si se sabe cómo usarlos).
No hay una métrica o un patrón exactos para calcular cuánto hay que invertir para obtener los objetivos que se buscan, pero sí debiera primar la búsqueda de opiniones profesionales, casos de éxito, promedios de la industria a la que se pertenece y cálculos generosos que usen la información que se posee.
Una señal de que se está invirtiendo demasiado poco es comparar el monto mensual con el de un sueldo de un profesional intermedio. Como mínimo, tiene que ser una cantidad de dinero similar, hasta para las marcas más pequeñas. Podrá estar distribuido de formas muy distintas, según el país, el tipo de marca, el público objetivo, etc. Pero, si se invierte más en un sueldo de un profesional promedio que en el marketing de los Social Media, es altamente probable que se esté invirtiendo muy poco. Y, siendo el marketing de Social Media una actividad de resultados no lineales, invertir X menos dinero no necesariamente implicará obtener X menos resultados: por debajo de cierta línea, no se obtiene nada en absoluto.
En el marketing online, así como sucede en infinidad de otras disciplinas, se obtienen resultados proporcionales a lo que se ha invertido (y solo si las cosas están bien hechas).